No está teniendo suerte el Club Deportivo Toledo en las últimas semanas. Los resultados no acompañan y la plantilla se está viendo mermada por las sanciones y las dolencias físicas. El entrenamiento de este miércoles, preparatorio para recibir al Conquense este domingo, se saldó con una lesión de rodilla de Dani Alonso que podría ser bastante grave.
El héroe del ascenso recibió un fuerte golpe en Santander el pasado fin de semana en el partido contra el Racing B y en la sesión de entreno de este miércoles se terminó de dañar en una acción en solitario. El jugador quedó tendido en el suelo con ostensibles signos de dolor.
Las primeras exploraciones hablan de un fuerte esguince de ligamento lateral interno con afección al menisco pero no se descarta que pueda haber algo más grave. Este mismo jueves está previsto que Dani se someta a una resonancia magnética que diagnostique con claridad la lesión.
Los pronósticos no son muy esperanzadores y, como mínimo, el jugador estará de baja un mes. Si hay rotura y se necesita operar el tiempo de recuperación haría que el jugador se perdiese casi toda la temporada. Esperemos que finalmente todo quede en un gran susto y que la lesión sea la mínima posible
(El Digital Deportivo)
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