viernes, 12 de marzo de 2010

ARQUINVER Y SALVATOL: NUEVO CAPÍTULO DE LA VENTA DE ACCIONES

EL CD Toledo sigue estando en la primera plana por temas del pasado. Ayer se vivió un nuevo capítulo con ante un juez para determinar si se admiten las medidas cautelares que solicita el grupo Salvatol, antiguo propietario de la entidad, a Arquinver, empresa que se hizo con la mayoría de las acciones y que aún se mantiene al frente.
En la práctica, Salvatol solicita que el club quede inmovilizado en el plano accionarial, para que no se pueda ejecutar su venta en las próximas fechas hasta que se aclare un aspecto del acuerdo de venta que quedó colgado, allá por mayo de 2007.
En principio, Arquinver convinó en pagar 600.000 euros por el club «libre de cargas», como manifiesta el actual presidente, Juan José del Valle. Se cumplieron con los primeros pagos, pero se dejaron a deber por parte de la empresa torrijeña «los últimos 275.000 euros», como admite el máximo mandatario verde, porque «surgieron una serie de deudas de las que no había constancia en el momento de la compra y que corresponde afrontar a Salvatol, por eso se van descontando de lo que a nosotros nos pidieron por hacernos con la acciones».
Enfrente, está la postura de Salvatol, con Ramón García Samaranch como pieza visible: «Nosotros dejamos reconocido que dejamos una deuda en el club, pero también quedó firmado que se cuadraba con unos ingresos que no hemos percibido y que se percibieron en su momento, gestionados por nuestra directiva pero cobrados ya durante el mandato de Arquinver».
En esta tesitura, Salvatol reclama por la vía judicial el pago de lo que les resta por percibir «291.000 euros según nuestros cálculos, con lo que dejamos a deber cubierto por los ingresaros que llegaron, por ejemplo, por el ingreso de subvenciones y algunos palcos».
Estos números los matiza Del Valle con dos ejemplos ilustrativos: «No fueron satisfechas, por ejemplo, una deuda con la ropa deportiva que asciende a 80.000 euros y otra con la Seguridad Social de 150.000 euros; nuestra directiva, de forma responsable, decidió gestionarlas a pesar de que no nos correspondían, pero ese dinero habría que descontarlo de lo pactado». En concreto, «el descubierto con la Agencia Tributaria se está pagando de forma aplazada tras conseguir un acuerdo y adelantar una cantidad cercana al tercio del total adeudado».
Con el juicio previsto para mediados de junio, las medidas cautelares se ven como «una anécdota» en el cuadro verde, porque sólo hemos tenido problemas de pago puntualmente. Sin embargo, ambas partes coinciden en intentar solventar el asunto de forma amistosa antes de pasar por el tribunal. Incluso, la próxima semana podría haber una reunión entre Salvatol y Arquinver.